Hace unos días subimos unas historias desde el Lago Tanganica y los mensajes empezaron a llegar: «Así que Tanganica es un lugar», «¿Entonces Tanganica existe?», «No puedo creer, mi sueño, conocer Tanganica». Así, muchos.
La realidad es que Tanganica existió y existe, pero cambió su forma y en esta historia te vamos a contar lo que fue, lo que es y una curiosidad muy particular de esta parte del mundo.
Tanganica, esa palabra que muchos usamos para referirnos a algo muy lejano, es el nombre de un lago y por mucho tiempo también fue el nombre de la tierra que quedaba al Este de esa porción de agua.
Hoy, esa tierra (y más) se llama Tanzania. Y el cambio de nombre de Tanganica a Tanzania ocurrió cuando el país añadió la isla de Zanzíbar. La solución que encontraron para nombrar al nuevo país es un resumen perfecto de esos cambios:
TANganica + ZANzíbar = TAN-ZAN-IA.
Por eso, si se quiere visitar Tanganica, la única opción es el lago. Aunque si vas a la parte continental de Tanzania, también estás sobre el suelo de la antigua Tanganica.
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